martes, 30 de octubre de 2012

Drama woman.

Nuestra relación está muy mal, se va desmoronando cada día. El tiempo parece eterno, y mi condena será siempre estar con él. Aunque debo confesar que tengo un miedo enorme de dejar a Javier. Él es un hombre posesivo, explosivo y ademas psicosomático. Yo siempre le he dicho que todas sus enfermedades son creadas por su mente desde que dejo "a la última", pero su mal encarado rostro me responde "a ti que te importa", y después comienza a quejarse por algún otro dolor inexistente. 
Me hace la vida tediosa, sin embargo no podría vivir sin él, mi dependencia es tremenda, sobre todo la económica  no podría comprar los barnices de colores, los rimel contra el agua, y mis mocasines de esos que están muy de moda. Hemos vivido juntos los últimos doce años. Día a día, cada segundo; desayuno, comida y cena. Mis recuerdos más viejos lo involucran, desde que en la primaria lo veía alejarse tomado del brazo de una rubia bastante mayor. Ahora los recuerdos más inmediatos; su empeño por hacerme una inútil mujer: me lava, me plancha, sacude, barre... Yo le digo que lo ayudo, pero me argumenta que soy su princesa. Aunque mi anhelo de independencia ha sido desde siempre, últimamente se ha agudizado, no puedo depender de este hombre toda la vida. Ademas la cosa es que ya no lo aguanto, es fastidioso, temperamental, grosero... se queja de mi vestimenta, del color de sombra que uso en los ojos, de lo corta de la falta y lo provocador de mis escotes. Es un celoso, pero también es un pica flor de primera, me cree tan babosa como para no darme cuenta, por Dios, en mi cara ha filteado con mujeres y no le he reclamado nada. Pero al final uno se acostumbra... a sus cosas, a su manera, a su existencia, a su olor... pero el otro día que llegué le había cambiado el color al cuarto, argumentando que el color anterior era muy infantil. Me he enojado tanto que le dejé de hablar una semana. El Miércoles me sentí mucho más enojada porque no llegó a tiempo por mi y tuve que caminar ocho cuadras, ¡ocho largas cuadras! Para hacer la situación más dramática, que tomo la cafetera, sirvo en la taza, me siento en la sala cruzada de piernas y prendo un cigarro. Me decidí a esperarlo para detonar mi coraje. Vivir con él es todo un compromiso social. Al abrir la puerta me vio y sin pensarlo corrió a arrebatarme el cigarro, lo apretó en su mano y todo destrozado me lo aventó a la cara. Enseguida la taza volaba para rápidamente estamparse en la vitrina. Me arrastró hasta la habitación. Yo sólo le gritaba que ya no lo soportaba y que ahora si me iba. El muy tarado salió con la misma de siempre; que el es mi padre y si me voy de la casa, el va por mi de las greñas. 

Oraciones:

No es el cielo a donde parten los buenos. Al infierno no van solo los malos. 
Nunca las buenas intenciones supieron distinguir entre las vías correctas y las incorrectas. 
La travesura es la mas inocente de la acciones, y la mas castigada por quien de imaginación carece.
Los sueños son un mar utópico para aquellos que los harán realidad. 
El esfuerzo es lo que está sirviendo tu madre en el plato a la hora de la comida. 
El verdadero amor se siente cuando ves sonreír a un hijo. La tristeza mas profunda cuando te dicen que ese hijo ha muerto. 
La felicidad en los días de juventud es invitarle un helado a esa persona y quedarte sin un peso. La felicidad de los veteranos amantes es bailar cerquita y despacio, acariciando sus arrugadas pieles las canciones de cuando eran jóvenes.
Los sentidos son mas explícitos cuando lo ves a los ojos, cuando tu lengua gusta del sabor de su lengua, cuando te acercas a su cuello y trasciende su aroma, cuando paseas tus manos por sus caderas, cuando te susurran un te amo y la piel se te enchina. 
La libertad eres tu en calzones por el patio de la casa. La esclavitud es el perro amarrado al tronco del árbol que está en el patio de tu casa. 
La comezón se quita mejor cuando alguien te está rascando según tu ordenes las coordenadas (más arriba, más abajo, ahí mérito). 
El miedo y la excitación comparten la oscuridad
La luz de los focos ahorradores parece luz de hospital. Los hospitales deprimen.
El café de todos los velorios sabe igual. 
Todos los tacones suenan igual, pero siempre reconocerás los tacones de mamá. 
Las más grandes pasiones alimentan la vida de los artistas. Un carpintero también es un artista.
Los libros de superación personal no sirven, mejor leer cuentos infantiles. 
La música es la mejor de las terapias. La cerveza es tu mejor compañera un domingo soleado. 
Si no amas lo que haces vivirás amargado hasta tu jubilación. 
La masturbación es la mejor forma de conocerse a si mismo. 
Los mejores consejos los da la almohada. 
Cuando llueve nadie se atreve a mojarse. 
No hay mejor cama que tu cama. 
El silencio puede ser mas molesto que el ruido. 
Si coges pronto ya no crecerás (dice mi abuelita). 
Hay palabras que dan cosquillas. 
Los errores se hicieron para ser practicados toda la vida. 
Tus hijos no conocerán muchas especies animales mas que en monografías. Las ilustraciones de las monografías deprimen. 
La mujer buenota con la que te vas a casar engordará, y tu también, y no van a caber en una cama matrimonial. Enviudarás y sobrará ese espacio en tu cama, sin embargo ya te habrás acostumbrado a tu pedacito. 
Mucha gente querida morirá. 
El tiempo pasará rápido. 
La única persona que siempre estará contigo es esa que ves en el espejo.